Kokoro, de Natsume Sōseki

Hace algo más de un año que reseñé Sueño profundo, de Banana Yoshimoto, el último libro de un autor japonés que había leído hasta hoy. Al finalizar la reseña, decía: “Todavía sigue siendo un muestreo ínfimo el que he realizado con los autores japoneses y tengo que seguir mi línea de investigación. Pero, por el momento, sigo captando los mismos rasgos y, sobre todo, las mismas sensaciones. Y me gusta”. Esos rasgos a los que me refería son la tristeza, el sueño, el suicidio, la muerte y, por lo general, poca visión optimista de la vida, todo ello envuelto...

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